miércoles, 20 de febrero de 2013

EL CUENTO UNIVERSAL

EL CUENTO UNIVERSAL En el principio no había nada. Ni luz ni oscuridad. Ni materia. No existía el tiempo y tampoco había espacio. Sólo una noción de Necesidad y Urgencia. Sin forma pero consciente en sí; tenía el poder para recorrer la nada comprimida. Entrar y salir de ella y ser ella misma. Viajaba reconociendo y creando. Así logró su primera y única creación: siete ámbitos dimensionales. La primera fue la de la consciencia. La segunda la de la inconsciencia. En la tercera ubicó la supraconsciencia. Luego la alterconsciencia desde donde se podía ver a las otras tres. Después estaba un mar oscuro de consciencia que consumía a las cuatro primeras devorándolas sin destruirlas. El sexto ámbito dimensional estaba vacío, era sólo un sendero hacia la última donde estaba lo incomprensible. La Necesidad y Urgencia hizo que la consciencia fuera ciega, fuera torpe pero miedosa, egoístas, mezquina, ambiciosa; en la primera dimensión donde la habían ubicado se miraba lo ancho, lo largo y lo alto y por eso su límite siempre era el horizonte. La inconsciencia fue activa y fría y en su dimensión lo ancho era limitado, lo largo y lo alto infinito. Belicosa resultó la supraconsciencia y viajar a través de ella exigía temperamento fuerte ya que se debía de ir construyendo lo largo, lo ancho y lo alto. Un breve descanso, un reposo fue la alterconsciencia pero en su reino había sólo alto y ancho. Pero el mar oscuro de consciencia devoraba; no había odio en él, era su sino. El sendero carecía de todo, era sólo un pase, un boleto hacia lo incomprensible… Y aquello sin forma, con Necesidad y Urgencia, prendió una mecha… ¡La nada explotó! Con fuerza, con poder inconmensurable se encendió y fue expulsado desde el centro de la nada: ¡todo! Surgió la materia y la antimateria, el tiempo y el espacio, el orden y el desorden. Todo, desde su epicentro viajaba violentamente en espiral y recorría las siete dimensiones que a su vez se recorrían mutuamente. El caos era el orden, lo normal. La materia batallaba contra la antimateria hasta que una barrera natural las separó. Y en una se posó como depredadora, para consumirla: la consciencia. En la otra, la inconsciencia. Energías que llegaban hasta la supraconsciencia, ahí se quedaban, sin forma, energías en sí. La alterconsciencia recibía las ondas expansivas de las tres primeras y las proyectaba como en un espejo. Esa era su razón de ser. Pero luego todo era devorado por el mar de negrura implacable. Y en la primera dimensión se formaron los soles y pequeños planetas a su alrededor girando sobre sí y en traslación. Hermanados en millones y danzando alrededor de un oscuro centro formaron galaxias que se apagaban y se prendían. Y uno de esos planetas, que rotaba alrededor de un pequeño sol, tuvo potencial. Desde él se miraban todas las dimensiones. Se creó entonces la vida orgánica; minúscula. Hubo vida inorgánica en la segunda dimensión. Al nacer la vida nació también la muerte. Todo lo que nacía moría, en la primera dimensión y cualquier otra. La consciencia, como depredadora trató de apoderarse de la vida orgánica pero no encontró la forma de tomarla. Y esa vida pequeña creció y creció, por instinto. De repente, el mar oscuro de consciencia soltó hambriento la destrucción. Viajó desde la quinta dimensión como ángel de exterminio. Arrasó con todo. Lo que quedó de vida sobrevivió a duras penas. El pequeño sol brilló y brilló, rotaba y se desplazaba. La vida volvió a crecer en el minúsculo planeta y se multiplicó por millones en millones de tiempo, que ya existía. Pero nuevamente el oscuro mar devorador de consciencia soltó a su ángel de exterminio. Y los seres que respiraban sobre la tierra colapsaron. Así se satisfacía nuevamente el oscuro mar de consciencia, devorando las olas de energía provocadas por las muertes masivas. Quedó vida casi como embrión; minúscula, rastrera y voladora. El planeta nuevamente resucitó. La primera dimensión ofrecía peligros que le abatían desde las otras dimensiones para devorar. Y la consciencia todavía no se aposentaba en ningún ser vivo. La inconsciencia había hallado reposo en los seres inorgánicos y en la energía la supraconsciencia. Ante eso la consciencia se tornó viajera. Recorría constantemente las siete dimensiones pero sólo encontraba sentido a su existencia en la primera. Sabía que era devorada no sólo por el mar oscuro, mas no se lamentaba de su destino. Ningún ser era todavía apto para ella. Perdida en las profundidades del universo retornó a su dimensión y… Encontró un primate. Un animal gregario, débil, sin posibilidades frente a las demás especies. Pero era el alimento ideal para la consciencia. Y se posó por fin en un ser orgánico. Lo despojó de su mente propia, matándole todo instinto. Lo nutrió de miedo, de egoísmo, de mezquindad y ambiciones. Le puso su propio sello. Eran pocos y los multiplicó. Necesitaba devorarlos sin que se dieran cuenta de sus artificios. Ciegos y torpes les hizo vivir un espejismo: creían que eran ellos quienes pensaban. Entonces se llamaron así mismos: humanos, hombres. Varón y mujer buscaban explicaciones a través de esa mente foránea; habían perdido sus facultades naturales, su instinto básico pero habían ganado una manera de sobrevivir que les permitía superar a las otras fieras. No comprendían sus orígenes. Y se volvieron rutinarios, megalómanos. Conscientes intentaban explicar el eco de la creación que les llegaba y las otras seis dimensiones que sentían en su piel. Y aquella Necesidad y Urgencia también fue intuida. La manada de primates la llamó Dios. Al fin la consciencia ya tenía en el hombre su razón de ser y su sustento, su alimento, su humanero. Pero el miedo del hombre era su miedo. Temía que el oscuro mar negro de consciencia soltara nuevamente su ángel de destrucción ya que cuando tenía hambre devoraba por millones las vidas orgánicas. Para protegerse, además de ciego y torpe hizo al hombre belicoso y avaro. Los hizo acumular riquezas para cegarlos todavía más. Vivos eran devorados por la consciencia y la energía de su muerte era el sustento del oscuro mar de consciencia. Y por mezquindad y egoísmo se mataban entre sí. Se tornaron extremadamente violentos y depredadores aniquilándose y aniquilando a otras especies. Erigieron dioses y hasta algunos, así mismos se llamaron dioses. La consciencia aprovechó el instinto asesino del hombre para tener un equilibrio con el oscuro mar de consciencia. Y cada cierto tiempo se mataban entre sí por miles y hasta millones. Esa fue su clave. Las siete dimensiones existían y se devoraban entre ellas y ella como devoradora necesitaba un ser orgánico que fuera ciego, torpe y belicoso que no notara que era alimento, que era devorado. Lo nutrió de importancia personal, lo hizo ver, no más allá de sus ojos, sino un espejismo; lo mantuvo entretenido viéndose sólo a sí mismo. Y así, lo hizo crear instituciones, ciudades, cultos, fetiches. Para que el hombre se sintiera seguro por siempre y con vida eterna. Por miedo le mostró la visión de un universo imposible. Necesitaba un humanero estático y no viajero. Y lo logró cuando aquellos primates erigieron imperios una y otra vez, destruyéndose entre ellos, en un universo caníbal que se devoraba también así mismo. Pero la necesidad de la consciencia era tener alimento eternamente. La vida orgánica sobre la que se había posado no podía aniquilarse totalmente; por eso les infundió más y más miedo, terror a lo desconocido. Y el hombre hizo planes contra fuerzas extraterrestres. Ya no tenía temor de que fuera viajero porque hasta donde él llegara, lo más lejos e imaginable, también eran sus dominios. Mas… Un hombre la descubrió. Hastiado de tantas imágenes, palabras y miedos que no le pertenecían detectó al depredador foráneo. Dejó de verse en tantos planes, ambiciones y diálogos internos; obvió las ideas mezquinas. Así, llegó a la conclusión de que él no era él. Poco a poco fue viendo las demás dimensiones. Como chispazos que viajaban extrañamente hasta su entendimiento e intuición. Logró entender la naturaleza de su mundo y su razón de ser. Existía únicamente para ser devorado y vio el drama completo de su especie; logró mirar cómo actuaba la consciencia y cómo depredaba a sus congéneres aniquilándoles desde niños toda posibilidad de libertad. Lo más traumático para él fue saber que el mismo ser humano presentía cómo era consumido y destruido. Viajó a la segunda dimensión y para su sorpresa los seres inorgánicos también vivían de la rapiña estrujando. No podía viajar con su cuerpo consciente sino como energía y esa energía aquéllos entes la consumían. E igual actuaba la energía que habitaba en la dimensión de la supraconsciencia. Y el oscuro mar de consciencia sólo le provocaba terror porque su naturaleza era devorar todo lo que pasaba por su reino. Supo que muchos, miles habían estado ahí antes que él, huyendo de la consciencia depredadora, buscando una eutrapelia*; sólo para encontrarse con otro campo de batalla. Las únicas que lograban sobrevivir más allá de la consciente eran las mujeres porque extrañamente las demás dimensiones y quienes la habitaban eran de energía femenina. Sólo en la dimensión consciente había energía masculina y eso era lo que le consumían las demás dimensiones; pero el mar oscuro se alimentaba de todo tipo de muertes. Las únicas que tenían esperanza para sobrevivir eran las mujeres. Ningún hombre, ningún varón tenía la posibilidad para salvarse. Así supo el sino masculino; todo lo que se miraba desde la consciencia era una ilusión, era la maldición de su especie: la ceguera y torpeza. Dolorosamente. Para salvarse aquel hombre tenía que evolucionar. Sólo había una manera para sobrevivir a las demás dimensiones… Debía transformar su energía masculina a una energía femenina. Trató de hacerlo. No pudo. Su naturaleza original era inmutable. Comparó su configuración energética con la de una mujer. Se rediseñó externamente tratando de lograr un cambio. Pero sólo logró la apariencia externa, hasta ahí no más. A como pudo, viajó nuevamente, cual camaleón, por las dimensiones con la forma aparente de energía femenina y no fue tocado. Descubrió por fin el boleto hacia la libertad que el hombre tenía. Fue como vivir un sueño, un mito. No lograba el cambio total pero sí una semejanza. Los seres inorgánicos lo confundieron con uno de ellos; la energía de la tercera dimensión lo dejó pasar; el oscuro mar de consciencia se alimentaba sólo de muerte y su aspecto energético no era de muerte y navegó sin problemas hasta la senda. No pudo más. La última escala implicaba un viaje sin regreso. Retornó, narró todo a los demás hombres y mujeres; quiso incluso mostrarles como eran devorados en vida; pero nadie le creyó la verdadera Historia del Cuento Universal. Y hasta patadas le dieron. Mas era libre… El único hombre verdaderamente libre. Pero toda su especie ganado para el eterno matadero. * Recreo inocente, descanso. ÓSCAR GRANCH MANAGUA, NICARAGUA. 17/02/2013

jueves, 7 de febrero de 2013

¿Qué evaluó la UNI en los exámenes de admisión de enero del 2013?

¿QUÉ EVALUÓ LA UNI? Recientemente las autoridades de la UNI informaban al pueblo de Nicaragua los resultados de los Exámenes de Admisión aplicados a los bachilleres que egresaron durante el 2012 de todos los colegios de secundaria. El dato fue escalofriante. Un golpe mortal a la lógica de cualquier educador que tiene como único interés el educar. Sólo el 6% de más de dos mil alumnos habían logrado aprobar. Ya a estas alturas del tiempo, mes de febrero, las aguas del desastre se han calmado pero es necesario valorar esta situación que año con año se repite ante la afasia del Estado de la República y la impotencia de nuestra sociedad que ve los datos como si no fuese necesario revisar lo que está pasando. Debemos de decir que ni siquiera las bombas atómicas lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki tuvieron resultados tan desastrosos. (Sólo en Hiroshima la bomba causó en los primeros momentos 60,000 muertos y más de 100,000 heridos. Un 37.5% si el total de habitantes hubiese sido de 160,000). Este dato en sí, 6%, es suficiente para que el Gobierno de la República declare un Estado de Emergencia Educativa. Lo triste y doloroso es que el silencio ha sido la costumbre de nuestra autoridades cada que se anuncian esos resultados. Y he aquí la pregunta lógica ¿Por qué el Gobierno calla? ¿Qué hay detrás de esos números? ¿Por qué el 94% de los mejores alumnos en Matemática no logran aprobar año con año esos exámenes? ¿Qué pasa? Sólo el señor Arríen ha dado declaraciones y señaló como necesarios cambios en la currícula de esa Universidad. Pero hay que analizar el problema. Y debe de enfocarse desde diversas perspectivas. La primera debe partir desde un enfoque pedagógico. Enumeremos algunos supuestos del porqué esos resultados y analicémoslos. • El 94% de los alumnos no estudió. Lo dudoso de este supuesto, por eso no es una hipótesis que se sustente por sí sola, es… ¿Para qué se matricularon? ¿Para quedar en el ridículo públicamente? • Sólo el 6% se preparó conscientemente. Si ese es el caso… ¡Felicidades para estos jóvenes! Pero también aquí hay muchas dudas. • El 94% de los docentes de Secundaria de Nicaragua son mediocres y no están a la altura de lo que exigen los profesores de Matemática de la UNI. ¿Será posible? Si ese es el caso hay que quitarles urgentemente el marcador y el borrador porque están devengando un salario que no se merecen, menos un supuesto bono solidario, para los maestros del Estado, y más porque están engañando a nuestra juventud. Pero hay muchos elementos en contra de esta hipótesis. Aunque también se les aplicó las mismas evaluaciones a algunos docentes de Secundaria y hasta ellos mismos lo reprobaron. ¿Significa que no saben de Matemática? ¿Será que el templo del saber de los números sólo está en la UNI y tenemos además en ese lugar a las mentes más brillantes de nuestro País? Bueno, lo cuestionable es que muchos, muchísimos de los docentes que imparten Matemática en la Secundaria egresaron de la UNI; e incluso algunos estudian todavía en esa Alma Máter… ¿Qué pasa entonces? • Se impuso el factor económico. Sólo el 6% tuvo para pagar docentes especializados, a la altura de los de la UNI. El resto, económicamente pobres, se prepararon por sí solos y el fracaso era una “Crónica de una muerte anunciada”. Si esta es la hipótesis acertada diremos que se está haciendo un daño irrecuperable al sistema educativo; se está aumentando la brecha económica porque entrar a esta Universidad no será símbolo de calidad sino símbolo de un estatus económico: Tenés para pagar… Podés estudiar en la UNI. Universidad que nació supuestamente como una Institución Pública, y que recibe millones y millones del 6% asignados por el Estado a la Educación Superior. • La UNI aplicó un examen no para evaluar alumnos sino para buscar genios, futuros doctores de números. Si ese es el criterio que se impuso a los que se debe de quitarles el borrador y el marcador es a los docentes de Matemática de la UNI porque vale decir que ni ellos son genios, ni siquiera figuran o han figurado como candidatos al prestigioso Premio Nóbel de Matemática; ni han estado ni están a ese nivel y ni siquiera se les conoce en el Mundo Académico Internacional por sus aportes. • La UNI aplicó un examen malicioso, buscando solamente como aplazar y dejar en el ridículo a nuestra juventud. Si es tal vez esa la realidad hay que realizar un cambio completo de todo el personal; dejando sólo vigilantes, afanadoras, servicios generales, secretarias. El personal docente y los dirigentes no merecen, si esta es la situación, estar en sus puestos por tener el alma negra. Y el Estado puede realizar este cambio y está en su derecho por los millones de córdobas que entrega a esta Institución. No puedo negar que los profesores de Matemática de la UNI dominan su materia, pero la lógica me indica que no saben evaluar. Todavía no se ubican que la educación busca por sobre todo la equidad. Y un primer principio para entregarle una educación y una evaluación igualitaria a nuestra juventud parte del hecho de que no todos los seres humanos somos iguales, ni pensamos iguales, ni resolvemos los problemas de igual forma y en el mismo tiempo. La educación enfrenta a los estudiantes a problemas, él/ella debe de resolver esa problemática, mas el salón de clases, lo dijo Blomm, no es un hipódromo donde se corre y el caballo que llegó primero es el que ganó. Los discentes no corren para ganar, estudian para aprender y la evaluación debe de estar dirigida también en este sentido, la evaluación educativa no ofensiva, menos destructiva. Y eso es lo que hicieron los docentes de Matemática de la UNI y la Institución en sí: Ofendieron a nuestra juventud. Esos datos, dignos de un holocausto, son ofensivos, destructores. Y lo triste es que ni el Gobierno, ni el CNU, ni el Ministerio de Educación se pronuncian. Incluso somos testigos de cómo figura el CNU en asuntos electorales, que creo no es su campo de acción y además permitió que la Asamblea Nacional promulgara una ley en la que se deja en la orfandad y desempleo a más del 90% de docentes de Educación Superior; pero ante esta grave problemática se tornan ciegos, sordos y mudos. La Matemática, una ciencia, de las principales que nuestra especia ha inventado, vive en Nicaragua momentos críticos. Como nunca en la historia de nuestro país desde que inició su moderna vida como nación independiente. Como sociedad tenemos… ¡Debemos de rescatarla! Y junto con ella todo el proceso educativo. Y para ser constructivo, dar en verdad aportes que abonen positivamente a la superación de esta crisis propongo algunas aspectos necesarios que tal vez permitan la superación de este problema que lleva ya más de 20 años. • La UNI está obligada como Institución a presentarle a nuestra sociedad del porqué elaboró tan maliciosamente “el gran bebé” que provocó semejante destrucción. Se sabe ya que son cuatro. Esos exámenes deben de ser valorado públicamente desde diversas ópticas; no puede quedar olvidados; los docentes de la UNI están obligados a rendir un informe a todos los nicaragüenses porque somos nosotros quienes pagamos sus salarios y…, muchos ciudadanos vivimos en la pobreza y algunos en la miseria para que ellos tengan un mejor nivel de vida. Mucho trabajo social se puede impulsar con los millones que se les entregan a las Universidades por el mandato del 6% y es por tal razón que no podemos aceptar que se nos diga alegremente que nuestra juventud son una manada de incapaces. • Cambiar el paradigma de todos los docentes de Matemática. Si yo estoy enseñando y todos mis alumnos salen aplazados, entonces ¿Qué enseñé? Es un problema pedagógico grave y con el paradigma actual quienes cargan con la culpa de no aprobar son los alumnos y el profesor es inocente. Es típico de los últimos 20 años los porcentajes desmedidos de reprobados en esta materia. Para cambiar se debe de aplicar reformas radicales; pagarles por rendimiento y calidad. ¿Cuántos te aprobaron? Ahí va a estar un porcentaje de tu salario. ¿Cuánto aprendieron? Ese tendría que ser el otro porcentaje de tu salario. Así se superaría un problema típico del salón de clases: no contextualizar. El docente de Matemática llega y sin preámbulo entra en materia, no pregunta si se sabe tal o cual concepto, es obligatorio para este profesor que se sepa, y no se detiene. Esa actitud es propia de un juzgado pero no del proceso enseñanza-aprendizaje. Ante un juez yo no puedo alegar ignorancia de la ley. Pero un salón de clases no es un juzgado y el alumno está en su derecho al ignorar ciertos conceptos o procedimientos; la Educación se rige por principios contrarios a las leyes que los seres humanos creamos. Juzgar no es evaluar, evaluar no es aplazar, diagnosticar no es destruir, enseñar no es buscar sólo genios. ¿Por qué si una persona les paga por aparte para que instruyan a su hijo logran que ese estudiante apruebe? ¿Por qué no aplican estratégicamente las mismas metodologías y técnicas con los estudiantes que el Estado les entrega para instruirlos? La culpa lógicamente la tiene el Estado que no ha reclamado por tanta mediocridad educativa; la culpa la tiene el CNU porque desde el primer momento que los docentes de Matemática de la UNI me dan esos resultados debo de investigar qué pasó y estoy obligado a pronunciarme sobre lo que indagué. • Si es que en realidad el 94% de los alumnos que se presentaron a la UNI a buscar un cupo eran en realidad mediocres, El Ministerio de Educación está obligado a buscar, junto con el CNU una solución a esta problemática. ¡Señores! ¡De ambas Instituciones! ¡Sus megasalarios son la pobreza de la gran mayoría de nosotros los nicaragüenses! Pregunto ¿No le podemos exigir al CNU, en base al 6% del presupuesto que se les entrega, que coadyuve a una mejor orientación y capacitación de los supuestos mediocres docentes de Matemática de la Educación Media? ¿No se le puede exigir al Ministerio de Educación que se pronuncie y busque, además, como enlazar correctamente los Subsistemas Educativos? Algo hay que hacer porque sino pronto Nicaragua estará importando, contratando en el extranjero, profesores de Matemática dado que los que tenemos no logran un correcto proceso asimilativo en nuestros estudiantes. • Realizar un cambio, como lo propuso el señor Arríen, en el currículo, la currícula y demás programas de ciertas Universidades… ¿Por qué? Es ilógico que un profesional egrese de una Universidad como especialista en Ingeniería y a la vez como profesor de Matemática, o Economista y profesor de Matemática, especialista en Finanzas y profesor de Matemática… Y así sucesivamente. Un ingeniero tiene que ser sólo ingeniero y si quiere tomar como proyecto de vida la docencia a través de la Matemática debe de buscar los créditos pedagógicos que lo acrediten para ser maestro. La docencia es una especialidad y en nuestro país se cometen errores al poner a un periodista a dar clases de Español o a un ingeniero a impartir Matemática. Zapatero a tu zapato reza el adagio popular. Ahora bien, si me he equivocado en mis apreciaciones y en realidad los docentes de Matemática de la UNI son verdaderos genios incomprendidos por nuestra sociedad, tengo que proponerle al Gobierno de la República de Nicaragua que, antes que se jubilen estos docentes se los ofrezca a la NASA, o a cualquier otro país que participe de la carrera espacial. ¿Por qué? Porque aquí en Nicaragua no aterrizan, no tienen los pies sobre la tierra, viven en un mundo más allá de la estratosfera y la mesosfera de nuestro planeta. Tal vez puedan ellos resolver todos los problemas que la humanidad tiene para explorar el universo. Guillermo Antonio Granera Chavarría Profesor de Lenguaje Email de la NASA ante posible oferta Ante posible propuesta de Gobierno de Nicaragua para que NASA aceptar docentes de Matemática UNI, NASA aclarar que rechazar esa propuesta porque cuando docentes de Matemática UNI explicar sus teorías, conceptos y procedimientos y nosotros no entender, NASA no poder aceptar que profesores de Matemática UNI a nosotros llamar horse. Óscar Granch

domingo, 6 de marzo de 2011